En la última semana, el Ministerio de Salud realizó cambios en el panel de datos sobre la pandemia de covid-19, dejando de informar el número acumulado de muertes y cambiando el horario de publicación de los datos. El viernes, la página se desconectó y regresó el sábado, pero solo con información diaria. Las bases de datos con la historia de covid-19 en Brasil han desaparecido del repositorio del SUS. Además, el Ministerio de Salud anunció un "recuento" de la cantidad de muertes, acusando a los departamentos estatales de falsificar datos, pero sin presentar ninguna evidencia.
Las medidas contradicen la Constitución Federal, la Ley de Acceso a la Información, las buenas prácticas de transparencia pública reconocidas internacionalmente y demuestran, una vez más, el espíritu antidemocrático del gobierno de Jair Bolsonaro.
El caso se vuelve aún más grave ya que el Presidente de la República atribuyó algunos de los cambios al deseo de socavar la cobertura periodística de la pandemia, cuando, consultado por los periodistas sobre el retraso en la divulgación de los números, respondió: "Terminó en el Periódico Nacional". El uso de maquinaria pública para dañar a la prensa no es nuevo en el gobierno de Jair Bolsonaro. En agosto de 2019, el presidente firmó una medida provisional que liberaba la publicación de los balances de las compañías de periódicos, según se informa, para tomar represalias contra el periódico Valor Econômico.
Abraji repudia el abuso de autoridad por parte del alto nivel del gobierno federal y condena un intento de imponer obstáculos a las actividades periodísticas al ocultar información de interés público. También hace un llamado a los otros poderes de la República para que inspeccionen y castiguen cualquier acto de irregularidad administrativa con el mayor rigor de la ley.
Fuente: Abraji