El presidente de Ecuador, Lenin Moreno, confirmó esta tarde la muerte de los tres periodistas ecuatorianos que habían sido secuestrados por disidentes de las FARC -según informaron medios internacionales- en la frontera con Colombia, el 26 de marzo.
El mandatario ecuatoriano, que el jueves había dado un plazo de 12 horas a los captores para obtener información sobre el reportero Javier Ortega, el fotógrafo Paul Rivas y el conductor Efraín Segarra, manifestó que no recibieron ninguna prueba de que estén vivos y aseguró que, lamentablemente, cuentan con información que confirma su asesinato.
El jefe de Estado dijo también que más allá de los esfuerzos realizados por el Gobierno, los criminales nunca tuvieron la voluntad de entregar a los periodistas sanos y salvos.
También, precisó que una alta autoridad de la iglesia iba a actuar como mediador para la liberación de los secuestrados. “Él estaba yendo al sitio porque él manifestó que había conocido durante su niñez y juventud a este tipo denominado el ‘Guacho’. Quiero agradecerle a él por ese acto de humanismo, solidaridad y valentía”, señaló.
Moreno, además, anunció que hay una recompensa de US$100.000 para quienes brinden información sobre los autores del crimen. De acuerdo con el mandatario, la captura del terrorista alias ‘Guacho’ es un alto objetico del gobierno. “Hemos incluido al terrorista alias ‘Guacho’ dentro de los más buscados en Ecuador y ofrecemos 100.000 dolares como recompensa que nos permita dar con su paradero”, indicó Moreno.
Además, el presidente ecuatoriano manifestó su pesar por lo sucedido y pidió respeto para sus compatriotas.
Desde el IPYS, condenamos el asesinato de los periodistas y nos solidarizamos con sus familiares, con el diario El Comercio de Ecuador, y con la sociedad ecuatoriana en este duro momento y nos unimos en su dolor. Además, esperamos que una investigación pueda permitir la captura de los responsables de este vil crimen que es un lamentable atentado contra la libertad de expresión y la libertad de prensa.