
Nuevo informe alerta sobre violencia, acoso judicial y exilio forzado de periodistas
En América Latina, ejercer el periodismo es cada vez más peligroso. Un nuevo informe del Instituto Prensa y Sociedad (IPYS) documenta un panorama alarmante: entre septiembre de 2024 y marzo de 2025, ocho periodistas fueron asesinados en la región —dos más en el Caribe—, convirtiéndola en la zona más letal para la prensa fuera de países en guerra como Palestina o Sudán.
El reporte, titulado Violencia contra la prensa: el común denominador en América Latina, revela que cada dos horas un periodista o medio de comunicación es atacado. Las agresiones incluyen amenazas, campañas de desprestigio, detenciones arbitrarias, desapariciones, demandas judiciales abusivas y exilio forzado. La impunidad es casi total: prácticamente 100% de los crímenes contra la prensa en la región permanecen sin justicia.
Entre los hallazgos más preocupantes destacan:
- México y Ecuador concentran buena parte de la violencia vinculada a crimen organizado y corrupción.
- Guatemala y Perú registran un uso creciente del acoso judicial y la desinformación como herramientas para censurar.
- Nicaragua, Cuba y Venezuela expulsan a decenas de periodistas al exilio cada año, restringiendo severamente el derecho a la información.
- La precariedad laboral es generalizada: en países como Argentina, ocho de cada diez periodistas ganan menos que el valor de la canasta básica.
El documento también resalta casos emblemáticos presentados en la última Conferencia Latinoamericana de Periodismo de Investigación (COLPIN), realizada en España, donde se expusieron investigaciones sobre corrupción, redes criminales, tráfico de armas y resistencias comunitarias frente a amenazas medioambientales.
“La violencia contra la prensa es sistémica, no distingue ideologías y erosiona la democracia”, advierte el informe, que concluye con un decálogo de recomendaciones para Estados, organismos internacionales y ciudadanía, entre ellas derogar leyes restrictivas, garantizar condiciones laborales dignas y reforzar mecanismos de protección.
El informe Violencia contra la prensa: el común denominador en América Latina puede descargarse aquí.