El 21 de junio de 2024, el reportero Marco Calderón, y el camarógrafo, Felipe Díaz, del equipo de noticias de Canal N fue retirado a empujones por la seguridad municipal del alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, cuando éstos intentaban acercarse al funcionario para hacerle preguntas sobre su gestión.
Los hechos ocurrieron en un evento donde el alcalde inauguraba la estatua de otro ex alcalde también bastante cuestionado por presuntos delitos de corrupción.
Cuando diversos periodistas de medios de comunicación se acercaban al alcalde para recoger declaraciones, de pronto, un agente de Serenazgo empujó al reportero mientras se escuchaban gritos de otros agentes intentando dispersar a la prensa.
Marco Calderón declaró a la Asociación Nacional de Periodistas, ANP, que fue empujado por dos agentes diferentes y uno tercero que lo sujeto por el cuello para retirarlo. Cuando el camarógrafo Felipe Díaz intentó registrar los hechos los agentes de Serenazgo impidieron que filme y los empujaron también.
Las agresiones menguaron cuando el jefe de Serenazgo ordenó que sus efectivos se controlen para dejar hacer su trabajo a la prensa.
ANP revisó las imágenes difundidas del momento de la agresión, donde pudo identificar que el primer empujón habría sido dado por un agente policial identificado en su marbete como H. Ávila G, quien caminaba al lado del alcalde.
IPYS rechaza lo ocurrido y exige a las autoridades identificar a los agresores y sancionar con las debidas medidas disciplinarias por obstruir el trabajo de la prensa.